La unidad de cuidados intensivos neonatales es un lugar especial donde médicos y enfermeras altamente capacitados le brindan a tu bebé cuidados durante las 24 horas. La meta del personal de la UCIN es la misma que la tuya, ayudar a que tu bebé crezca y se vuelva lo suficientemente saludable para irse a casa contigo.

Si tu bebé nació prematuramente, con un defecto de nacimiento u otra complicación, podría necesitar cuidado especial específicamente involucrado en el cuidado de recién nacidos. No todos los hospitales tienen una UCIN, por lo que tu bebé tal vez fue transferido aquí desde las instalaciones donde nació.

Al principio, la UCIN podría parecer un lugar frío, sombrío y muy ruidoso, lleno de tubos, cables, aparatos luces brillantes y alarmas, pero no hay porqué preocuparse, la mayor parte del equipo unido a los bebés tiene un sistema de alarma integradas que suenan al detectar un cambio para alertar al personal. Estas alarmas no siempre significan que algo está mal con un bebé, sino que podría requerir de una respuesta por parte de los cuidadores.

El personal vigila constantemente estas máquinas y siempre está preparado en caso se presente cualquier problema. 

Para ayudarte a familiarizarte con las personas que cuidan a tu bebé, presentamos a continuación los cargos y descripciones del equipo médico en la UCIN, recuerda que cada hospital podría tener menos o más miembros de la UCIN.

Neonatólogo:

Un pediatra (doctor de niños) con capacitación avanzada en el área de medicina para el cuidado intensivo de recién nacidos. Tal vez percibas que el neonatólogo a cargo de la UCIN cambia y que estos doctores trabajan por turnos. El neonatólogo a cargo es llamado el médico “de guardia” por lo que tu bebé podría tener uno durante el día y uno diferente por la noche.

Adjunto:

Un médico pediatra (de niños) completamente capacitado y experimentado quién está en capacitación para convertirse en neonatólogo.

Residente:

Un doctor que está especializándose en medicina pediátrica. Los residentes están involucrados de manera activa en el cuidado de tu bebé y son una buena fuente de información.

Enfermera neonatal:

Una enfermera que completó un programa educativo avanzado en neonatología y trabaja bajo la dirección del neonatólogo.

Enfermeras de la UCIN:

Tu hijo tendrá una o más enfermeras asignadas en cada turno, estos pueden variar entre ocho y doce horas. Las enfermeras intentan cuidar a los mismos bebés cuando trabajan.

Enfermera primaria:

Planea el cuidado de tu bebé y es responsable de conocerlo a él y a ti, y de estar al tanto de cualquier necesidad especial que pudieran tener. El nombre de la enfermera primaria a menudo está escrito en la tarjeta de identificación de tu bebé que cuelga por encima de la cuna. Ella es la que está más íntimamente familiarizada con tus necesidades y organizará el plan para cuidar de tu bebé.

Terapeutas respiratorios:

Los terapeutas respiratorios están capacitados específicamente para cuidar a pacientes con dificultades respiratorias. También son expertos en el equipo médico utilizado para tratar estos tipos de problemas. Los terapeutas respiratorios están disponibles en la UCIN 24 horas al día. Si tu bebé tiene algún tipo de problema respiratorio, verás frecuentemente al terapeuta junto a su cuna. Ellos podrá responder tus preguntas acerca de los pulmones de tu bebé.

Trabajador social de la unidad de recién nacidos:

Si tu hospital tiene un trabajador social, tal vez encontrarás que son de gran apoyo para tu familia; ellos te pueden ayudar haciendo arreglos de hospedaje (algunos hospitales tienen un espacio que permite que un padre se quede con su pequeño), transporte y alimentación; también podrán aclararte las políticas y procedimientos hospitalarios, además de contarle al médico de guardia o al adjunto sobre las dudas y preocupaciones que pudieras tener. Tal vez te recomienden asistir a un grupo de padres, leer materiales de lectura y recursos informáticos. Al momento de ir a casa, te asistirán en la planeación del cuidado de tu bebé. 

Otros cuidadores:

Dependiendo de las necesidades de tu bebé, podría requerir del cuidado de otros doctores especializados. 

Si bien, está parece demasiada información para procesar, pronto aprenderás y te sentirás más cómoda con la rutina de la UCIN. No temas en aclarar todas tus dudas con el equipo de la UCIN, están ahí para ayudarte. 

Recuerda siempre que, aunque la UCIN no es lo que habías imaginado para tu bebé, esto es necesario para su crecimiento.

Consulta a tu médico.