En el marco del proceso de diagnóstico, el médico puede indicar que se dé al bebé una dieta de eliminación por 2 a 4 semanas seguida de una dieta de provocación alimentaria. Si se sospecha que la alergia a la proteína de la leche de vaca está mediada por IgE, los médicos también pueden recomendar una prueba de punción cutánea o un análisis de sangre1.1.

Dieta de eliminación

Una dieta de eliminación implica retirar de la dieta del bebé las proteínas de la leche de vaca durante 2 a 4 semanas, y supervisar el efecto que esto tiene en los síntomas. Los médicos pueden recomendar también eliminar por completo los alimentos que contienen proteínas de leche de vaca de la dieta de las madres que dan el pecho. Si el bebé toma biberón, el médico puede recomendar cambiar a una fórmula hipoalergénica especial diseñada para bebés con alergia a la proteína de la leche de vaca. Un médico, una enfermera puericultora o un dietista podrían indicarte cómo iniciar una dieta de eliminación y durante cuánto tiempo mantenerla. Normalmente se prescribe un período de prueba de 4 semanas.

Si el médico recomienda una fórmula hipoalergénica como parte de la dieta de eliminación, esta no debe contener proteínas de leche de vaca intactas, para que el sistema inmune deje de reconocerlas como nocivas. Podría tratarse de una fórmula extensamente hidrolizada o basada en aminoácidos libres. Las fórmulas hipoalergénicas extensamente hidrolizadas son eficaces en aproximadamente el 90 % de los bebés con alergia a la proteína de la leche de vaca.

Si a un bebé se le diagnostica alergia a la proteína de la leche de vaca grave o alergia alimentaria múltiple, o si sus síntomas no se resuelven tras probar una fórmula extensamente hidrolizada durante un período de prueba, los médicos pueden recomendar una fórmula basada en aminoácidos libres. Más información sobre cuáles podrían ser estas leches y fórmulas idóneas.

Provocación alimentaria

Una vez que el bebé haya seguido una dieta de eliminación de las proteínas de la leche de vaca durante varias semanas según lo recomendado por el médico y los síntomas hayan mejorado, podría recomendarse una «provocación alimenticia oral». Consiste en darle a tu bebé una pequeña cantidad de un producto lácteo, si los estas amamantando tu tendrás que tomar algún producto lácteo y si el bebé estaba tomando una fórmula infantil tendrás que volver a darle probaditas de esta fórmula para ver si aparecen de nuevo los síntomas. Es importante que no hagas esto por tu cuenta, normalmente esta prueba la hace el médico, y puede ser que en algunas ocasiones te pida que intervengas.

Si en el momento de la provocación alimentaria o después de esta no se observa ninguna reacción alérgica, el médico podría investigar otras causas posibles de los síntomas del bebé, como cólico o intolerancia a la lactosa. Si se observa una reacción alérgica, el medico corroborará que se trata de una alergia a la proteína de la leche de vaca. Es posible que el bebé tenga que seguir una dieta de eliminación hasta que la alergia desaparezca. El médico te indicará cuándo y cómo probar si se puede retomar la dieta normal.

 
Bibliografía
1. Venter C et al. Clin Trans Allergy 2017;7:26.
2. Koletzko S, et al. JPGN 2012;55: 221–229.